El valor garantizado para esta modalidad es el de reposición, no se tiene en cuenta la depreciación del aparato.
Por lo tanto, la suma asegurada en un seguro de avería de maquinaria debe ser el valor de reposición de la misma, es decir, el valor de nuevo de esa misma máquina o de iguales características y/o rendimiento más todos los gastos que su reposición conlleve: envío, transporte, aduana y montaje (si éstos fuesen estrictamente necesarios).
Si la avería es total, se sustituye la máquina o se indemniza por el valor acordado previamente en las condiciones.
La pérdida total de una máquina supone la indemnización a valor real de la misma. Si lo que se produce es una avería parcial, entonces, al igual como ocurre con los seguros de automóviles se sustituye la pieza rota por una nueva.
Resumiendo. Asegurar la máquina por su valor a reposición incluyendo gastos accesorios y de montaje.